Las bailarinas sostenibles de MOMOC

¿Qué es lo primero en lo que te fijas al comprar unos zapatos nuevos? ¿Te atrae más la estética o la comodidad? Hoy os traigo una descripción de las 3 características en las que me fijo yo a través de las bailarinas Nuage Morton Velours vegan de la marca MOMOC. He tenido el placer de probarlas y en esta reseña os cuento mi experiencia.

Sin duda recomiendo que leas la increíble entrevista que hicimos en exclusiva a Gabriela Machado, fundadora de la firma para saber un poquito más sobre esta impresionante marca.

La estética de las bailarinas

No podemos dudar que las bailarinas siempre han sido un clásico y es el estilo de zapato que nunca puede faltar en nuestro fondo de armario. En concreto, estas bailarinas están diseñadas en colores neutros (blanco y negro), lo que las hacen perfectas para combinar con todos los colores. Recuerdan un poco al estilo Chanel, por lo que también dan un punto incluso más elegante y clásico.

Este tipo de calzado queda genial con diferentes outfits, por lo que si las compras, podrás usarlas con vestidos, faldas o pantalones. Sin duda una adquisición perfecta para cualquier ocasión.

Cómo sientan

En cuanto me las he probado, he sentido como la bailarina se adaptaba perfectamente a mi pie, sin apretarlo, tan solo sosteniendo. El calor puede hacer que los pies se hinchen y las Nuage Morton Velours se adaptan a esos cambios sin dañar al pie. Además, el tacón hace que no pises en plano, dando una forma al calzado beneficiosa para la pisada.

En cuanto a la talla, no dudes en pedir la tuya de siempre. Aunque si dudas entre dos tallas yo te recomiendo que escojas la mayor, ya que el largo se adapta un poco menos y es preferible que no apriete los dedos.

¿Cómo te hacen sentir las bailarinas de Momoc?

Cuando compro un calzado siempre espero que me haga sentir especial de alguna forma. Y las Nuage Morton Velours me hacen sentir muy elegante, las lleve con el outfit que lleve.

Además, el sonido del tacón contra el suelo hace que todo el mundo se gire para verte pasar, lo cual hace que me sienta importante.

Finalmente, tener puestos unos zapatos que son sostenibles y hechos a mano, también sienta muy bien, porque sin duda genera la sensación de que estoy creando un camino hacia la sostenibilidad con cada paso que doy. Sé que, en relación al precio, no son unos zapatos que puedan estar dentro de mi presupuesto. Pero también sé que es un precio justo por lo que realmente conllevan.