El pintalabios en tiempos de crisis. Todo lo que necesitas saber del Lipstick Index

Nadie iba a imaginar que en tiempos de crisis o en bajos estados de ánimo, la venta de pintalabios se iba a disparar. ¿Alguna vez has escuchado sobre el término Lipstick Index?

La barra de labios es el elemento principal en nuestro neceser de maquillaje, pues pintarse los labios es el gesto más eficaz y sencillo para estar arreglada en un instante. Es el último paso en la rutina de maquillaje de cualquiera, incluso puede ser la más especial. Asimismo, el pintalabios se convierte en la mejor inversión a la hora de comprar el maquillaje.

El término Lipstick Index fue acuñado por Leonard Lauder, director de la compañía Estée Lauder, quien notó un aumento de ventas de este producto en su propia marca, al igual que en marcas de lujo como Chanel o Dior. Una tendencia bastante interesante a estudiar. Esta teoría tomó fuerza durante la Gran Depresión del 29 e incluso tras los atentados del 11-S en Nueva York.

Entonces, ¿a qué se debe esa gran variación en la venta de pintalabios ante los periodos de crisis? Te lo explico sencillamente. El pintalabios es el elemento protagonista en un fenómeno en épocas de incertidumbre porque cuando la economía sufre altibajos en general, solo nos podemos permitir escasos lujos como por ejemplo hacernos con una barra de labios de calidad.

Es extraño este curioso comportamiento que coincide con la pandemia y el uso obligatorio de la mascarilla, así pues, la demanda de pintalabios en España ha aumentado un 234%. Un dato bastante impactante, ¿verdad? Antes de continuar explicando sobre el término Lipstick Index, debo recalcar la necesidad en muchos trabajos de llevar maquillaje aún con mascarilla. Es un efecto que puede llegar a ser perjudicial para nuestra piel, sin embargo, existen varios métodos para contrarrestar el daño que se produce bajo esta capa protectora.

¿A qué motivos se debe este cambio ?

¿Habéis notado que se utiliza las barras de labios permanentes y semipermanentes cada vez más? Debido a las mascarillas y para no correr el riesgo de manchar, muchas han recorrido por este método.

Otro motivo ha sido la vuelta a las oficinas, al lugar de trabajo el cual ha servido para estrenar un nuevo color de labios tras muchos meses trabajando en casa. Pero debéis tener en cuenta el crecimiento de reuniones a través de videollamadas y por el cual muchas han continuado a utilizar este cosmético aun estando en casa.

También la necesidad emocional de sentirse mejor, ya no solo estéticamente, sino como respuesta al actual ambiente de incertidumbre social ha valido para que muchas se animaran a pintarse los labios.

Un motivo más es que el pintalabios es un cosmético increíblemente barato, por lo que su compra resulta ser un lujo asequible. Calidad y precio pertenecen a cualquier barra de labios a pesar de estar atravesando un bache económico.

Asimismo, en España ya se ha empezado a ver esta tendencia de sobremanera. Sin embargo, de marzo a junio del año pasado, la demanda se desplomó hasta un 76% con motivo del confinamiento completo. No obstante, este periodo duró muy poco pues la llegada de julio provocó el crecimiento drástico en la demanda de los pintalabios.

“El ser humano necesita un aliciente o un lujo para levantar el ánimo y para demostrar que está bien”

Juan Carlos Gázquez, profesor de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC

¿Los pintalabios pueden ser perjudiciales?

Existe un gran abanico de barra de labios en el mercado, sin embargo ¿qué tan perjudiciales pueden ser?

Cada vez que hidratamos nuestros labios con un bálsamo, ingerimos el 80% de lo aplicado. Por lo que se recomienda evitar productos labiales que contengan aceites minerales, los cuales son acompañados con las siglas MOSH (Mineral Oils Saturated Hydrocarbons) y MOAH (Mineral Oils Aromatic Hydrocarbons. Fórmulas dañinas derivados del petróleo.

Los pintalabios veganos no usan ceras animales ni poseen en su fórmula la composición MOSH y MOAH dicha anteriormente. Contienen pigmentos naturales, facilitando la hidratación a tus labios.